Recién un año después de editado me decidí a escuchar el último disco solista de Paul McCartney, Chaos and Creation in the Backyard. Había leído varios comentarios positivos, también una entrevista en la cual Paul contaba lo riguroso que había sido con él Nigel Godrich, famoso productor de bandas como Radiohead. Parece que Godrich lo obligó a cambiar su método habitual de trabajo, varias de sus manías y hasta el título del álbum y el arte de tapa.
Por suerte. Porque apenas con una par de escuchas fue suficiente para advertir que el disco es realmente muy bueno. Lo que tendría que haber hecho desde hace años y tardó bastante en hacer: rock acústico y clásico, sencillo y directo, pero a la vez elegante, sin concesiones y facilismos. Una grata sorpresa proveniente del beatle que menos simpático me caía, aún admitiendo lo groso que es. Y felicitaciones para Godrich: hay que bancársela para ponerle los puntos a sir Paul.
Acá, un video en vivo en un estudio, haciendo un muy lindo tema de este disco. Casi a la altura de sus mejores épocas.
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jueves, 5 de octubre de 2006
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Publicadas por Arte y Sport a las 4:05 a. m.
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3 comentarios:
Leyendo el coment, parece que escuchaste el disco mas arriesgado del milenio...
Me parece que escribís mucho mejor de lo que leés.
Paul siempre fue el beatle más resistido por el círculo de fans de la banda. Lennon fue mucho más carismático. Pero a medida que pasan los años y las sucesivas escuchadas de los discos, estoy convencido de varias cosas: Paul fue el que compuso los temas para mí más significativos, Ringo fue el baterista IDEAL para la banda, John fue el que mejor carrera solista tuvo, y George no brilló pero al ser tan distinto le corrió un poco los márgenes a la banda.
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